Aprender a hacer cupcakes: receta fácil de chocolate

Te encantan los cupcakes, ves un montón de recetas, de decoraciones, pero crees que no te va a salir y no lo intentas. Pues se acabó! Hacer un cupcake y que te quede no sólo riquísimo, sino precioso, ideal de la muerte, es super fácil. Sólo tienes que cumplir ciertas 'normas' básicas y tener las herramientas apropiadas.

¿Quieres lanzarte? Hoy comenzamos en Mummy & Cute una serie de post para aprender a hacer cupcakes y decorarlos. Y empezamos con una receta básica: cupcakes de chocolate:

PARA EL BIZCOCHO NECESITAMOS:

3 huevos
250 gr de mantequilla
210 gr. de harina de repostería
250 gr de azúcar blanco
1 teaspoon de Royal
30 gr. de cacao puro

El primer paso es tener la mantequilla y los huevos a temperatura ambiente. Debéis sacarlos de la nevera dos horitas antes de poneros a hacer los bizcochos.

Cuando vayáis a empezar, encendéis el horno a 160 grados, con calor arriba y abajo. Así habrá alcanzado la temperatura correcta cuando tengáis la masa lista para hornear.

Sacad también el molde de cupcakes y repartid en los huecos las cápsulas de papel rizado.

Ahora que está todo listo, empezamos con la masa:

Mezclamos en el vaso de la batidora, por este orden, la mantequilla, el azúcar, la levadura y el cacao. Cuando esté incorporado, añadimos los huevos y, a continuación, la harina en dos veces.

Repartimos la mezcla en las cápsulas, sin llenarlas más de 2/3 y las horneamos durante 18 minutos. Ojo que cada horno es un mundo. Igual tenéis que ajustar un poco el tiempo.

Una vez fuera del horno, esperamos 5 minutos para no quemarnos y sacamos los cupcakes del molde para dejar que se enfríen sobre una rejilla. Mientras, vamos a por la crema:

PARA LA CREMA NECESITAMOS:

3 claras de huevo
180 gr de azúcar
250 gr. de mantequilla
2 cucharadas de cacao en polvo

Os lo comento en cada receta de cupcakes: yo siempre hago la buttercream sobre la base de un merengue suizo. En mi opinión, no hay comparación con una crema de mantequilla normal. Es menos dulzona, menos empalagosa, más sedosa y no se nota nada el azúcar sin necesidad de comprar icing sugar.

En breve, publicaré un post mostrando paso a paso, con imágenes, como se hace porque no tiene ningún misterio. Hoy, os adelanto el proceso:

Ponéis agua al fuego en una cazuela. Cuando esté a punto de hervir, la retiráis y metéis dentro, al baño maría, un cuenco con las claras y el azúcar. Con la varilla vais removiendo hasta que el azúcar esté disuelto y lo pasáis al bol de la batidora.

Ahora toca subir esas claras, aumentando la velocidad poco a poco, hasta que tengáis un merengue firme, que haga picos. Entonces, comprobáis que no esté aún caliente (porque si no se nos derretiría la mantequilla). Si no lo está, empezáis a añadir tacos de mantequilla (a temperatura ambiente).

La mezcla parecerá cortada. Respirad. No os asustéis. No paréis de batir y veréis que en 5 minutos tendréis la crema más sedosa del mundo!!

Cuando esté lista, sin dejar de batir, echáis las dos cucharadas de cacao. O tres, si lo queréis más potente. ¡Y listo!

Diréis, sí claro, y ahora qué hago con la crema. ¿Cómo hago esa flor? Sólo necesitáis una manga pastelera y la boquilla 1M de Wilton. Metéis la crema en la manga, os ponéis en el centro del bizcocho y apretáis de forma continua mientras giráis, haciendo una espiral, en el sentido de las agujas del reloj.

Prometo post ya mismo con imágenes para que veáis que es super fácil. La boquilla va a dibujar la rosa por vosotros. Pero id intentándolo, que aunque no os quede una flor ideal, os vais a chupar los dedos!!